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07 de desembre 2010

Triturando el cerebro: el trabajo

Trabajar constituye, por esencia, un tormento difícilmente soportable. En muchos casos, puede desencadenar crisis nerviosas, ansiedad, alcoholismo, drogadicción, malos tratos a otros compañeros/as de tortura debido a la presión insostenible a que se somete a los reos obligados a trabajar para sobrevivir. La vida, por culpa del trabajo, queda reducida a una pequeña "mierdecita", si se me permite la licencia. Cuando no se trabaja, se descansa del trabajo, y se trabaja de otro modo: "consumiéndose" uno en el consumo/compra de objetos, la mayor parte de las veces inútiles, pero que son pequeños salvavidas de la frustración acumulada por tantas horas de sinsentido.

Dado este infierno del que nadie o casi nadie se puede sustraer, parece demencial que uno incurra en delito si quiere quitarse la vida porque considera que vivir trabajando (vivir para trabajar) no vale la pena, por ejemplo. Pero, claro, hay que sostener el pútrido sistema.

Resulta que ahora, en tiempos de crisis, el trabajo se ha convertido en un privilegio. ¡Encima! Uno no sabe si reír, llorar o romperse los nudillos contra un cristal cuando oficialmente y en el sentido común ve instalada la idea de que estar secuestrado a diario ocho horas (hay gente que trabaja 15 y sábados, domingos...) es necesario y da sentido a la vida. ¿Qué vida? No importa: una mierda de vida o una mediavida siendo generosos, pero lo que importa es respirar ¿no? Y el folleteo y las borracheras. eso es la vida...mmm qué interesante.

Creo firmemente que el suicidio debería ser una buena solución a la locura del trabajo para quien lo considere pertinente.

En cualquier caso, siempre existen libros de autoayuda que pueder ser útiles para aliviar el sufrimiento del trabajo, terapias, masajes, constelaciones y demás.

Uno puede estar muerto mentalmente pero continuar con vida. Estos libros o terapias es lo que pretenden, y con ello, ayudan a mantener el chiringuito del sistema de aplastamiento laboral. Un círculo cerrado y perfecto.

Siempre habrá quien disfrute trabajando: mejor para él. También hay personas a las que les gusta ser azotadas, ¿por qué no?.

Cuestión de gustos.

03 de desembre 2010

Brevexxx: Otra vuelta de tuerca de ZP

Zapatero anuncia la eliminación de la ayuda de 426 euros a los parados que no tienen prestaciones, la rebaja de impuestos a pymes y la privatización parcial de los aeropuertos, entre otras medidas para calmar a los mercados. Esta es la última perla del cobarde y antisocial presidente del Gobierno de España.

ZP es un peligro para todas y todos los españoles trabajadores (o no) con rentas medias-bajas. Los palos de ciego del presidente son unidireccionales: que los parados y los más débiles paguen la crisis financiera creada por los bancos y los grandes financieros. Obviamente, ninguna de estas medidas servirá para sacar a España de la crisis, pues no se hace frente al problema: la bestia desbocada de los mercados es el sujeto resposanble de la crisis, no los trabajadores. Pero no hay marcha atrás. ZP actúa al servicio de los criminales especuladores, no quiere hacerles frente. Llamarle traidor es poco, eso es un piropo.

La cosa pinta muy pero que muy mal. El conflicto social no tardará en salir a las calles.

"La Catalunya que sap on va" - el drama del huevazo

Uno no sabe qué pensar ante estas imágenes. ¿Teatro dentro del teatro? ... Tras quizá una posible "sonrisa" inicial, puede uno quedarse perplejo ante el visionado del lanzamiento del huevo a Manuel Iceta mientras ofrecía sus impresiones tras los resultados de los comicios a la Generalitat de Catalunya (28/11/2010). La impresión que le queda a un servidor es entre delirante y grotesca. No hay que perderse la cara de perplejidad de Iceta, al fondo el eslogan "La Catalunya que sap on va" [seguro...] y el "viva España" -o algo por el estilo- del lanzador del huevo (hay que afinar el oído) entre el bullicio. Un disparate sólo al alcance de las mejores performances de Salvador Dalí. Pasen y vean, y opinen si lo desean.