En la foto, judios anti-sionistas, ese sector de la población judia silenciado y contrario el estado sionista de Israel en las condiciones salvajes actuales.
La operación militar isralí entra en el sexto día con una incursión terrestre de media hora en Gaza. 'Margen Protector', así se llama la carnicería, ya ha causado 151 palestinos muertos y un millar de heridos. La última oleada de bombardeos israelíes causó la pasada noche la muerte de 18 palestinos en el barrio de Tuffah, en Gaza capital, cuando un avión atacó una mezquita y una vivienda a su lado, informó el portavoz de los servicios de emergencia en la franja, Ashraf al Qedra.
Otra foto de la disidencia judía contra el estado criminal de Israel
Los severos bombardeos nocturnos en Gaza siguieron al lanzamiento de cohetes por las milicias palestinas contra Tel Aviv y otras ciudades del centro de Israel, en un ataque que el brazo armado del movimiento islamista Hamás anunció de antemano por televisión y en el que difundía la entrada en servicio de un nuevo y desconocido cohete de largo alcance, el J80. Los proyectiles fueron derribados en vuelo por el sistema "Cúpula de Hierro", que en cinco días ha neutralizado 147 de los que se dirigían a centros urbanos israelíes.
Posteriormente, las milicias dispararon otra decena de cohetes contra varios blancos en Israel -ocho de los cuales cayeron en descampados y dos en el propio territorio de Gaza- y esta mañana, decenas de localidades despertaban de nuevo al ulular de las sirenas antiaéreas.
Al menos cuatro brigadas de infantería israelíes, apoyadas por cientos de tanques y
blindados, así como 8.000 reservistas, están listas a las puertas de la
franja, pendientes únicamente de la orden del gobierno del primer
ministro, Benjamín Netanyahu.
El diario Yediot Aharonot informa este domingo que la
decisión caerá "entre hoy o mañana" porque "no se puede tener a miles de
soldados esperando durante días", dado el riesgo que conlleva su
ubicación.
En la decisión influirá los avances que
produzcan las gestiones de los gobiernos de Egipto y Catar para
consolidar un alto el fuego.
Ambos gobiernos
comenzaron su mediación con israelíes y palestinos el viernes, pero por
ahora no se acaba de consolidar un pacto porque los primeros creen que
pueden sacar aún partido de las hostilidades y debilitar a Hamás, y los
segundos necesitan algún tipo de logro militar con el que poder
reivindicar su victoria.
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