¿Catalunya independiente?

Ayer pudo verse en Barcelona una de las manifestaciones más grandes que se recuerdan coincidiendo con la Diada del Onze de Setembre. Y no, no fue para denunciar a un gobierno corrupto y neocon como el de CiU en Catalunya que está llevando a los reos catalanes a la miseria, bueno a la mayoría no integrada en las 400 familias que cortan el bacalao de la comunidad.

La patria de Millet y de Montull -o sea Catalunya- será inundada en breve por parques temáticos para facilitar el pelotazo de un valenciano que vive de la estupidez humana y del ladrillo. Ninguna novedad. Pues bien, parece que esa Catalunya delirante y autocomplaciente ha caído en la tentación del independentismo más radical. Hasta Artur Mas habla de que hay que crear los instrumentos para la creación de un Estado Catalán. Han oído bien, Estado Catalán.

¿Un millón y medio o por el estilo de manifestantes se creen que es posible en el contexto actual de crisis y de ruina proclamar la independencia? Podría decirse mejor: un millón de perfectos imbéciles o ignorantes. Catalunya ha pedido al Estado Español unos 5.000 millones de euros para poder salir de la ruina pero al mismo tiempo quiere independizarse del pagador. ¿Surrealismo? Absoluto. ¿Cómo se come? Nadie lo sabe. ¿A qué viene la independencia si cada día hay más gente en Catalunya revolviendo la basura para llevarse un  pedazo de pan a la boca?

La independencia de Catalunya es una farsa. Pero bueno, esta tierra es proclive a los espectáculos, como el Foro de las Culturas, El  Mobile week o como se llame, Las Olimpiadas, Barcelona @... Ahora quiere echar gasolina al fuego y lo hace con alegría e ilusión.

¿Cómo acabar con este atajo de estúpidos independentistas de pandereta y cobardes en realidad? Ojalá alguién  pueda responder. Un tremendo despertar de esta locura secesionista está al caer.